Visita del Papa
Ha venido el Papa a Madrid
y la juventud le ha cantado ¡si, si, si!
contigo Papa, todos somos muy feliz.
Ha llegado el Papa y en Madrid
todo ha sido muy cuidado
y el Papamovil, limpiado y perfumado.
Los que creen y ve en el
al sucesor de Dios en la tierra
no le cabe duda que esto es verdad
y al mismísimo Dios representa.
¡Viva! el ¡Papa! ¡viva!, le canta
con amor entregado y pasión
de jóvenes enamorados.
Lejos de este ambiente solemne
donde le han llevado las imagenes
que forman parte de la tradición
de pueblos y ciudades.
Donde muchos somos afines
ya sean creyentes ya sean vecinos
que aman lo que forma parte
y que es legado de padres a hijos.
Y nadie y si es con cuidado y respeto
todos o la gran parte estamos
en su conservacion.
Pero sin duda ni participe en alabar
ni en apedrear, solo me viene
una dura realidad, a mi mente.
Los que en un cuerno, de un país
olvidado, miran al cielo
y ¡gritan! y ¡cantan!:
¿Papa?, si, claro, ¡papas con choco!
¡papas con alubias!, ¡papas con todo!
¡que venga el Papa, pero que venga
con muchos bollos!.
Y si es posible Papa Papito Papa,
traete de extrapelo ese vinito,
¡ay! que es gloria bendita.
Anda, a ver,
¿quien nos deja un Papamovil?
O que le parece,
¿si le dejamos un burrito?
Pero Papa hijo,
acuerdate de nosotros un poquito.
