3.2.11

Guadalquivir, mi rio, tu poema






Guadalquivir, mi río

Navega por Andalucia
un río muy bandolero
hijo de las nubes

que aun le amamantan
con ubres de cielo.

Dejado de su vientre materno
navega mi río muy niño

crece entre riscos y montes bellos,
a su paso, pequeñas localidades
y serpentea los pueblos, aldeas y parajes.


Campesinos y labriegos
adornan su camino
campos de cultivo

tierra de regadío
olivos y frutales.

Viejos puentes de piedra vieja                                                 
de manos esclavas construido
atestiguan el tiempo y el ayer del río.
Sangre derramada y el río va creciendo.



Se encuentra
con Córdoba moruna                     
se recrea con lances torero
chicuelinas de sabores

y pase de pecho.

Es mi río en Córdoba
un poeta enamorado

desde sus adentros.


Sigue su camino soñando
entre gente de la Vega
y pueblos blancos.


Da de beber al campo
engorda olivos y naranjos.
Ya esta mi río en La Algaba
y el río, se muestra inquieto.


Es su encuentro                                               
con Sevilla que la espera                 
para adornarla de besos
miradas que le agasajan

barquitos que le reman de versos.


Mira mi río la torre del oro
y se acaricia con la calle Betis
y llora muy enamorada
es pasión lo que siente
por Sevilla y por Triana.



Triste navega
en busca de Sanlucar marinera
es allí su final del camino

encontrarse con su destino, la mar.
Y el mar le espera
deseándole, le asemeja.


El Guadalquivir ya no es río
mi río ha crecido y es mar
con criaturas nuevas
y el paso del tiempo hundido
en barcos que le navegaron.



El  siente nostalgia y sueña
con poemas de poetas que
le dicen que volverán aquellos días
en que el era río.
Y río volverá, siempre eterno
Guadalquivir...