30.1.11

El vagabundo

He escuchado el cante mas profundo
de un tío que se moría por las esquinas
andaba solo poseído de no se que herida
enfermo pedigüeño que bebía a solas
Cante hondo en sus ojos
 en su mirada y en su planta
algo me llena tanto de su presencia
que no se que es
y no le hace falta el cante
para propagar su esencia
en tarritos pequeños a sorbos de vid







Aun le recuerdo y no lo compadecia al contrario
me llenaba su pena en forma desconocida
Hoy entiendo ese dolor elegido que el llevaba
con orgullo de hombre que camina